Dejándome ver

Cuantos años anduve con una armadura. Acostumbrada a cargarla y no entendía por qué mis pasos pesaban

Años protegiéndome,
Ignorando quien verdaderamente soy.
Ocultándome
En esa armadura

Soy tan sensible,
Mucho lastimaba.
Mi preocupación por el dolor
Se volvió en ocupación.
Me llené de ansiedad.

Yo rogaba
“Quítame esta sensación”.
Siempre acudí a Él
Mis sentidos estaban dormidos
No lo escuché

Pasaba el tiempo
Viviendo en este mundo de aflicción
Siempre recibí su consuelo
Me llevó a donde siempre me guió

Uno se dedica a retrasar los planes de Dios.

Había brazos abiertos
Había oídos, bocas, palabras, sonrisas
Amor, compañía, sabiduría
Su palabra en sus hijos,
Mis hermanos en Cristo

De la armadura
Me fui quitando parte por parte
Fui dejando que su luz me tocara
Fui siguiendo su camino
Y llegué desarmada.

Vulnerable a su presencia
Confesando cada detalle
Aunque sí me importara
Dejé que me vieran llorar.

Aun arrepentida
Afronto consecuencias
Que me llevan a su promesa
Ahora lo escucho
Está en mi y yo en Él