Mitad de diciembre

 Tan interesante la vida...

He comido horriblemente y no precisamente por las fechas.

Es mediados de diciembre, claro hay pozole, antojitos mexicanos... buñuelos, tamales, atole que no he probado esta temporada.

Mis sentimientos y emociones están hechos un remolino. Hace unos días la mitad de mi cara palpitaba -parálisis facial "ay dio mío" exageré.
Me acosté y se me pasó.

Qué sube y baja de emociones; montaña rusa de TODO, cómo no me preparé para todo esto.

Mi cuerpo pide azúcar, pide sal o pide solo respirar. En mis entrenamientos se siente cuando he comido del asco y ¡wow! Gracias a Dios no me he desmayado -que oso.

Que si sí, que si no, que si hubiera, que ahorita, que mejor ya no, que a ver pues que pasa.... Pfff y solo estoy yo para detenerme o impulsarme.

Ya resuélvete vida mía. Ya relájense emociones queridas. Ay sentimientos, háganme caso por favor.

Dios mío, quédate conmigo.