Veneno

 



Estos días me había costado mucho sacar de mi cabeza tus palabras. Dijiste que yo solo pensaba en mi y que así era yo “y está bien, no está mal, así eres tú”.

Me dolió mucho que tú pensaras eso. Me dolió mucho que tú me etiquetaras de esa manera. Me puso triste que tú prefieras verme así.

Y estuve en el camino de hacer lo que tú hiciste conmigo, dejar que esas palabras me envenenaran; dejar que ese pensamiento tuyo me llenara de un tipo de odio hacia ti.
Pero gracias a Dios, yo me dedico a buscarlo a él antes que a cualquier cosa. Me enfoco en escucharlo y terminé con ganas de orar por ti, por tu bienestar.

Ayer vi que yo no soy así, yo NO soy como tú dices o como tú prefieres pensar de mi. Ayer aún con lo que yo vivo esta temporada, fui y compartí de lo que tengo y del mucho amor que Dios me da. Contribuí como pude a un acto de amor y regresé a casa tan bendecida.

Dios me recordó muchas cosas en ese rato y hoy, voy logrando quitarle lugar a las palabras que no van para mi.

Comentarios

Entradas populares